Por su historia y su excepcional longevidad, Berger-Levrault es una empresa que inspira confianza. La evolución de la noción de confianza en lo digital se opone, de forma lógica, a la cultura de la empresa.
El BL Institut, campus «sin muros ni profesores», empezó a trabajar con la noción de confianza digital buscando mantener a la empresa en el epicentro de los retos sociales y poder compartir sus trabajos prospectivos tanto con colaboradores como con el público en general.
Lo digital para Berger-Levrault no es un campo más de actividad. Conscientes de la transformación que supone la tecnología «a la hora de la digitalización de nuestras vidas», los equipos de Berger-Levrault propusieron, ya en 2012, un marco global de reflexión sobre la confianza digital para entender y actuar frente a los retos actuales y de futuro. Expertos internos y externos, al igual que nuestros socios, miembros todos ellos del BL Institut, han hecho hincapié en la importancia de la noción de confianza digital como elemento clave para entender los retos. En colaboración con la Escuela Normal Superior, hemos editado un libro en francés titulado «La confiance à l’ère numérique», redactado bajo la dirección de los filósofos Milad Doueihi y Jacopo Domenicucci.
¿Cómo imaginar que lo digital pueda generar una nueva relación de confianza? Del análisis de la noción de confianza se desprende que depende tanto de cuestiones tecnológicas, como sociales y filosóficas, cuestiones que estamos explorando con la idea de trabajar en aras del interés colectivo.
Partimos de una primera pregunta: ¿qué es la confianza digital? El tema es amplio y la respuesta no es sencilla. De forma espontánea, lo digital genera una impresión de desconfianza. Si,por ejemplo, analizamos los sistemas de votación: las prácticas fraudulentas con voto en formato papel son tan numerosas que resulta imposible censarlas en su totalidad, y sin embargo, el voto electrónico suscita tales reservas que ni la clase política ni los ciudadanos se plantean el cambio. Aunque quede patente que cuando se ponen en marcha mecanismos de reputación electrónica, lo digital tiene un impacto directo en nuestras prácticas de confianza.
Para una empresa, trabajar con una comunidad de pensadores a la hora de explorar el tema de la confianza digital es un método atípico. Un centenar de nuestros colaboradores, participes en la metodología, han trabajado en temas como el derecho al olvido, la noción de vigilancia, de prueba, de seguridad, y hasta el enfoque blockchain, estudiando su potencial. Una vez más, vamos un paso por delante.