El objetivo del Cierre contable es determinar los ingresos y los gastos de las administraciones o empresas públicas durante el ejercicio económico, el cual comienza el 1 de enero y finaliza el 31 de diciembre, cuando llega ese día se cierran las cuentas y se realiza el análisis de estas. Después del cierre, las entidades deben presentar las cuentas al Tribunal de Cuentas y al Ministerio de Economía y Hacienda.
Las Entidades locales, como gestores de fondos públicos, tienen la obligación de rendir cuentas e informar sobre la actividad económica, financiera y presupuestaria que llevan a cabo, puesto que una amplia gama de colectivos como los órganos de gobierno, instituciones de control, empresas, agentes sociales, instituciones financieras, prestadores de servicios, acreedores, ciudadanos y, en general, todos aquellos que se encuentren afectados por la actividad de las Entidades locales, demandan esta información. La obligación supone la necesidad de registrar todas las operaciones derivadas de esa gestión y elaborar documentos que pongan de manifiesto la situación económico-financiera y patrimonial, los ingresos y gastos económicos, el resultado de sus operaciones y la ejecución del presupuesto de una Entidad local.
La presentación de esta información se hace, fundamentalmente, mediante unos estados contables que reflejan el resultado de la actividad económica de las Entidades locales y que forman las denominadas cuentas anuales. El contenido de las cuentas anuales se encuentra definido en las normas y principios que regulan la contabilidad de las Administraciones locales.
Por tanto, la contabilidad pública se configura como un sistema de elaboración y suministro de la información para las entidades públicas que debe organizarse para conseguir el cumplimiento de fines de gestión, de control y de análisis y divulgación, como:
La exigencia de información sobre la actividad económica y financiera será mayor cuanto mayor y más compleja sea esta actividad. Si algo tenemos claro es que el sector local español se caracteriza por la diversidad de las entidades y así, junto a grandes ciudades con más de un millón de habitantes, nos encontramos con pueblos que no superan el centenar.
La normativa contable no desconoce esta realidad y por eso tenemos, en estos momentos, tres modelos contables para dar solución a las necesidades de las distintas entidades locales. Para ello, se tienen en cuenta dos variables, su población y su presupuesto, que se utilizarán para determinar la dimensión de la entidad, y, por tanto, seleccionar el modelo contable a aplicar.
La regulación de la contabilidad de las Entidades locales se encuentra en los artículos 200 a 212 del texto refundido de la Ley Reguladora de las Haciendas Locales y en las Instrucciones de contabilidad local, que regulan estos tres modelos contables que tienen en cuenta la diferente situación de las Entidades locales.
En Berger-Levrault somos conscientes de que el Cierre Contable de una entidad es complejo y que requiere de tiempo de preparación y dedicación para que todo quede perfectamente cuadrado. Por eso, ponemos a disposición de nuestros clientes el Servicio de Cierre de Ejercicio y Apertura Contable.
Este servicio se ofrece todos los años, tanto a pequeños como a grandes ayuntamientos para que puedan disfrutar de sus ventajas, y usar su tiempo en otro tipo de tareas sin preocuparse.
Para este artículo hemos reunido datos significativos que puedan demostrar la eficacia del Servicio de Cierre, además se ha realizado en paralelo una encuesta que han respondido clientes que han contratado el servicio con anterioridad para poder valorar diferentes características del mismo.
Tantas buenas opiniones no puede estar equivocadas, si tu también quieres ahorrar ese valioso tiempo y aprovecharlo en otras cosas, contrata nuestro Servicio de Cierre Contable, contacta con nosotros y te ayudaremos.